Amazon ha cancelado las pruebas de su robot de entrega a domicilio Scout, como parte de los recortes de gastos que está haciendo la compañía.
Las pruebas se realizaban desde 2019, es la señal más reciente de que Amazon está comenzando a reducir los proyectos experimentales, en medio de la desaceleración del crecimiento de las ventas.
Alrededor de 400 personas estaban trabajando en el proyecto a nivel mundial, según la persona que solicitó su anonimato. Un equipo mínimo seguirá considerando la idea de un robot autónomo, pero la iteración actual no está funcionando.
En palabras de la portavoz de Amazon, Alisa Carroll: “Durante nuestra prueba de campo, trabajamos para crear una experiencia de entrega única, pero aprendimos, a través de los comentarios, que había aspectos del programa que no satisfacían las necesidades de los clientes; como resultado, estamos finalizando nuestras pruebas de campo y reorientando el programa”.
La compañía comenzó a probar los robots del tamaño de una hielera en aceras suburbanas, en las afueras del Seattle, en 2019, antes de expandir las pruebas al sur de California, Georgia y Tennessee.
Los dispositivos de movimiento lento, acompañados por cuidadores humanos durante las pruebas, fueron diseñados para detenerse en una puerta principal y abrir sus tapas para que el cliente pudiera recoger un paquete.
Amazon dijo que los robots que funcionan con baterías eran parte de un esfuerzo para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en sus operaciones de entrega.
La compañía tiene la reputación de respaldar experimentos radicales que pueden tardar años en dar frutos, una lista que incluye la tienda sin cajeros, drones de entrega voladores y una constelación de satélites que promete transmitir acceso a Internet en todo el mundo.
Amazon también congeló la contratación de sus equipos minoristas corporativos y está liquidando Amazon Care, su servicio de telesalud.
