Preguntas a Mustafa El Omrani, Director del Polo de Organización y Recursos Humanos en Al Omrane
Varios proyectos se lanzaron rápidamente después del inicio de la crisis, a saber, el Chatbot Al Omrane, el mostrador de pedidos digitales del Grupo Al Omrane, el conjunto de proyectos especiales “Mouakaba”, las firmas electrónicas y los marcadores electrónicos.
¿Qué acciones ha tomado su Grupo en este complejo marco de confinamiento?
Mustafa El Omrani: Antes del encierro y en vista de la evolución de la pandemia en los escenarios nacional e internacional, la Gerencia del Grupo comenzó a estudiar los diferentes escenarios posibles y a prepararse para la aplicación de medidas sanitarias gubernamentales basado en nuestro Plan de Continuidad de Negocio que representa todas las medidas destinadas a asegurar (entre ellas Mouakaba), de acuerdo con varios escenarios de crisis, el mantenimiento, si es necesario temporalmente en un modo degradado, de nuestras actividades y posteriormente preparándose para la reanudación de actividades en condiciones óptimas.
El Grupo Al Omrane estableció rápidamente comités dedicados para la gestión de esta crisis, a saber, el Comité de Vigilancia Económica, los Comités de Vigilancia a nivel de todas las filiales y la animación constante de los Comités de Seguridad y Salud con el claro objetivo de preservar la salud de sus empleados y socios al tiempo que garantiza la máxima seguridad y un servicio de calidad para sus clientes y ciudadanos institucionales. Además, se realizó una importante campaña de concientización y explicación en todas las empresas del grupo.
¿Le resultó fácil cambiar a un nuevo modo de organización y adaptarlo a este contexto de salud?
Hay que decir que el grupo ha estado suficientemente preparado, gracias a sus métodos de gestión de proximidad y a las herramientas digitales a su disposición, para cambiar fácilmente al teletrabajo mientras conserva una permanencia estrictamente necesaria para las actividades consideradas esenciales. En este aspecto, es muy importante, en mi opinión, acoger calurosamente la creciente movilización de todas las fuerzas vivas del grupo que han redoblado sus esfuerzos para adaptarse a las nuevas condiciones de trabajo y especialmente por su espíritu de lucha y creatividad en estos momentos difíciles para encontrar soluciones y mantener los mejores aspectos de las actividades del Grupo. Este período también se utilizó para intensificar la capacitación a través de las plataformas digitales del Grupo.
La digitalización constituye un avance importante, ¿tiene intención de mantener este enfoque después de la desconfinación?
El Grupo ha asumido el desafío desde 2012 para hacer de sus sistemas de información una palanca para la modernización y el rendimiento. Su ERP (SAP) es el fruto de un éxito colectivo que involucró a todos los empleados del Grupo en un enfoque participativo de intercambio e inversión para construir una herramienta de TI moderna, integrada y eficiente.
La hoja de ruta digital del Grupo Al Omrane, lanzada en 2019, también fue diseñada con colegialidad y con el mismo espíritu, colocando la innovación en el centro de las preocupaciones.
Este proceso llevó a la formalización de una hoja de ruta llamada “Digital High Speed - DGV”, que consta de una batería de proyectos estructurados en torno a tres ejes: su actividad principal (planificación urbana, vivienda y promoción de bienes raíces); sus actividades internas (recursos humanos, ventas y marketing, finanzas y control de gestión) e interacciones con contactos externos. Con el estado de emergencia de salud, el Grupo Al Omrane ha reajustado su Hoja de ruta digital para integrar un programa especial “Mouakaba” que incluye proyectos innovadores que permiten al Grupo adaptarse a esta nueva situación y preservar la salud de sus socios, clientes y ciudadanos a la vez que brindan un servicio de calidad. De hecho, varios proyectos nacieron rápidamente después del inicio de la crisis, a saber, el Chatbot Al Omrane,
¿Nos estamos moviendo hacia el contacto cero en el futuro?
Si solo hay una lección que se puede aprender de esta crisis, es que el mundo del mañana ciertamente será diferente y que debemos repensar y adaptar constantemente nuestras formas de trabajo, nuestros modos de interacción, nuestros paradigmas y leyes laborales y nuestros métodos de gestión. Ciertamente, la crisis del coronavirus ha provocado una carrera sin precedentes hacia el teletrabajo. Pero, este modo no puede cubrir todos los oficios y muchas actividades siguen dependiendo de los modos clásicos de trabajo mientras se espera una robotización que ciertamente no tardará en llegar.
