La cooperación científica internacional y el aumento de la inversión en investigación científica e innovación responden perfectamente a los desafíos actuales relacionados con el fin de la crisis de salud que ha afectado a todo el mundo.
La Unesco está comprometida con este objetivo y brinda apoyo técnico a los países miembros para ayudarlos a fortalecer sus métodos de enseñanza y ecosistemas científicos, cerrar la brecha entre el conocimiento científico y la política, y tener la previsión necesaria para aprovechar los avances en la ciencia y las nuevas tecnologías sin perder los valores humanos.
En los países del Magreb, se están haciendo esfuerzos encomiables para aprovechar el desarrollo de nuevas tecnologías. “La ciencia, por supuesto, ocupará un lugar especial en este mundo del mañana. El conocimiento científico siempre ha llevado a innovaciones notables, especialmente en contextos de crisis. Estas innovaciones han sido de gran beneficio para la humanidad”, subraya Golda El-Khoury, directora y representante de la Oficina de la UNESCO para el Magreb, quien revela en esta entrevista dada a “Le Matin”, y traducida por el equipo de ParadaVisual.com, que la estrategia de fortalecimiento se vincula con el entorno universitario del Magreb para apoyar la transición a un mundo mejor.
¿Crees que las principales transformaciones posteriores a Covid -19 se deberán en gran medida a la inversión en ciencia?
Golda El-Khoury: El mundo atraviesa actualmente un período de cambio y transformación social. Es cierto, y esperamos, que el entorno que nos llevó a la pandemia de Covid-19 será diferente. Antes de esta crisis de salud global, los valores humanos, la sostenibilidad de los recursos naturales y la preservación del medio ambiente no estaban en el centro del desarrollo y ocuparon el segundo lugar. Esta criatura infinitesimal que es el coronavirus forzará inevitablemente la génesis de otro mundo donde la ciencia, y más particularmente la digital, desempeñará un papel preponderante.
Hoy está claro que esta pandemia obviamente tendrá un impacto social, ambiental, económico y político en todo el mundo. Más allá de su dimensión de crisis sanitaria y económica, este impacto podría ser una oportunidad para la reinvención ambiental, social y obviamente política. Además, y a pesar de las condiciones desfavorables impuestas por el confinamiento, hemos visto aquí y allá multitud de innovaciones en diferentes campos que auguran un mundo donde la creatividad sería una palanca para fortalecer la resiliencia de las sociedades frente a posibles crisis en el futuro. La ciencia, por supuesto, ocupará un lugar especial en este mundo del mañana. El conocimiento científico siempre ha llevado a innovaciones notables, especialmente en contextos de crisis.
Creo que el mundo del mañana se verá fuertemente afectado por la transformación digital que avanza a un ritmo frenético y por el papel que desempeñará la ciencia en el desarrollo sostenible. Se abren grandes ventanas de oportunidad si todos mostramos solidaridad y unidad frente a los desafíos que tenemos por delante. En particular, debemos aunar los esfuerzos de la comunidad internacional para canalizar y enmarcar esta ola tecnológica para que no se convierta en una crisis ética. A pesar de esto, la pandemia de Covid-19 es una oportunidad increíble para la humanidad de construir sociedades del conocimiento basadas en el respeto por los derechos humanos y la naturaleza.
¿Cuál es su estrategia para fortalecer los lazos con el entorno universitario del Magreb para apoyar esta transformación científica?
La transformación científica no podría lograrse sin una educación generalizada y de calidad. De conformidad con su estatuto y mandato, la Unesco trabaja, entre otras cosas, para proporcionar asistencia técnica a los Estados del Magreb, que cubre nuestra Oficina, para ayudarlos a fortalecer sus sistemas educativos con el objetivo final de crear sociedades del conocimiento, inclusivo y preocupado por los imperativos del desarrollo sostenible.
Esta crisis ha revelado una gran necesidad en los países del Magreb en términos de técnicas adaptadas al aprendizaje digital. Esto requerirá una reconversión masiva de contenido y una aceleración de los programas para la generalización de las tecnologías de la información y la comunicación en las escuelas y los establecimientos de educación superior. La Unesco siempre ha reconocido el hecho de que las nuevas tecnologías tienen un potencial significativo para acelerar el progreso, cerrar la brecha digital y apoyar el desarrollo de sociedades del conocimiento inclusivas.
En respuesta a la interrupción masiva de la educación debido a la pandemia de Covid-19, la Unesco ha implementado varias acciones para apoyar el aprendizaje y el intercambio de conocimientos a través de los Recursos Educativos Abiertos (REA). Estas herramientas son esenciales para complementar los cursos formales en línea e incluso sirven temporalmente como la principal forma de educación para aquellos que no pueden acceder al aprendizaje en línea. La Unesco ha puesto a disposición de sus Estados miembros una serie de MOOC y REA que pueden proporcionar cursos en línea y contenido de aprendizaje autodirigido en plataformas móviles y de escritorio.
En los países del Magreb, se están haciendo esfuerzos encomiables para aprovechar el desarrollo de nuevas tecnologías. En apoyo de estos esfuerzos, recientemente se firmó un acuerdo marco de asociación tripartita en Rabat. ¿Puedes contarnos más sobre este trabajo reflexivo?
Este acuerdo entre la Unesco y dos grandes instituciones de educación superior, la Escuela de Obras Públicas de Hassania en Marruecos y la Universidad de Nouakchott Al Aasrya en Mauritania, es parte de los esfuerzos de la Organización para fortalecer la cooperación. sur-sur en educación superior e investigación en los campos de la ciencia y las nuevas tecnologías.
La pandemia ha demostrado al mundo entero la necesidad y la urgencia de fortalecer el espíritu y los principios de solidaridad y el intercambio de conocimientos entre las comunidades científicas internacionales para el desarrollo de la investigación científica.
Las nuevas tecnologías que constituyen el corazón de este acuerdo son palancas esenciales y motores de crecimiento eficientes que ofrecen soluciones innovadoras en términos de empleos de nueva generación para enfrentar los desafíos actuales y futuros. Como se está desarrollando actualmente, la inteligencia artificial, los procesos automatizados, la computación en la nube, la tecnología blockchain e Internet de las cosas están transformando profundamente muchas disciplinas e incluso toda la economía en muchos países. Este acuerdo reunirá los recursos y los esfuerzos de las tres partes para crear un marco de asociación en diferentes campos relacionados con la educación superior y la investigación científica. Más específicamente, esta asociación tripartita se centrará en la investigación científica y la innovación; desarrollo de capacidades para el personal docente y administrativo; certificación y educación continua; y la movilidad de estudiantes, docentes y personal administrativo. Este enfoque está en línea con la posición de Marruecos que promueve y alienta el papel de las Naciones Unidas y la Unesco en la promoción de la colaboración tripartita a nivel del continente africano y el mundo árabe.
¿Cuáles son las perspectivas de esta asociación?
Este acuerdo tendrá un impacto muy positivo en la preparación de los futuros ejecutivos marroquíes y mauritanos para la transformación digital que se avecina en el horizonte. Esto se logrará fortaleciendo las capacidades de los estudiantes e investigadores en tecnologías emergentes y el desarrollo de la investigación científica aplicada para explotar el potencial de la tecnología digital en la modernización de las economías de los dos países. El proyecto apoyará programas de maestría y capacitación doctoral en estos campos y permitirá la movilidad de estudiantes e investigadores. Nuestro objetivo es crear alrededor de este acuerdo una plataforma para la reflexión y el intercambio entre investigadores científicos del Magreb.
Como plataforma intergubernamental y laboratorio de ideas al servicio de sus países miembros, la Unesco está más que nunca movilizada para el desarrollo de la cooperación multilateral para una ciencia abierta al servicio de la humanidad y la naturaleza. Como tal, la Unesco exige el establecimiento de un pacto global para las ciencias abiertas, como un bien común de la humanidad, y una intensificación de la colaboración científica internacional. Las nuevas tecnologías abren horizontes prometedores no solo para la promoción de empleos de nueva generación, sino también para la aceleración de la cooperación internacional en los campos de la ciencia abierta, la investigación científica en particular, para fundar una nueva economía centrada en conocimiento y creatividad.
