El grupo marroquí Intelcia desarrolla su red de call centers
El grupo marroquí Intelcia, que se ubica entre los 5 líderes francófonos principales en la relación con el cliente, está ganando impulso en Dreux y Charleville-Mézières, y planea establecerse en los Estados Unidos.
Intelcia genera poco más de una cuarta parte de su facturación en Francia.
Creado en 2000, el grupo marroquí Intelcia continúa creciendo en Francia. En Dreux, el más grande de sus siete sitios hexagonales donde trabajan 600 empleados, la compañía empujará las paredes construyendo 700 metros cuadrados de oficinas adicionales y contratará a cien personas para fin de año. El grupo amplía su gama de servicios al ofrecer llamadas entrantes convencionales (servicio de ventas o postventa), así como más actividades técnicas, gestión diaria y operaciones administrativas.
Con sede en Casablanca, Intelcia, de la cual Altice se convirtió en el accionista mayoritario con un 65% en 2016, ha desarrollado experiencia en el campo de la salud y la jubilación, especialmente para las mutuales, con un negocio en auge en Dreux. Pero los equipos también trabajan para SFR y otros clientes en el sector de seguros. “Estamos comenzando a alejarnos de la clásica relación con el cliente buscando más y más personal calificado”, dijo el director de Francia, Yves Cornette.
2,000 empleados en Francia
El grupo logra un poco más de una cuarta parte de sus 200 millones de euros en facturación en Francia y ha duplicado su fuerza laboral en diez años para llegar a 2,000 empleados, de un total de 13,000 personas. Entre los otros sitios en fuerte expansión, el de Charleville-Mézières, donde Intelcia se mudó a las instalaciones del Ministerio del Interior después de ganar en 2018 un mercado para la Agencia Nacional de Valores Garantizados (ANTS). Los reclutamientos se están completando actualmente, con 250 contrataciones en la clave.
Además de sus centros de atención telefónica franceses, Intelcia está presente en Marruecos, Camerún, Senegal, Costa de Marfil, Mauricio y Madagascar. Pero el grupo ve más allá y espera abrir nuevos caminos para convertirse en un jugador de outsourcing global. El año pasado, el primer paso fue la apertura de un sitio en Portugal, antes de una probable implantación en América del Norte, probablemente en los Estados Unidos, que se esperaba dentro de unos meses.
