La “Oferta Marruecos”: Gobierno lanza plan agresivo para captar 130.000 nuevos empleos en offshoring antes de 2030 y transformar el sector digital
El Nuevo Gigante del Mediterráneo Despierta
El mapa global de la externalización de servicios está a punto de sufrir una reconfiguración sísmica. Mientras América Latina y Asia han dominado tradicionalmente los titulares del BPO y el desarrollo de software, un jugador estratégico en el norte de África ha decidido cambiar las reglas del juego. La “Oferta Marruecos”: Gobierno lanza plan agresivo para captar 130.000 nuevos empleos en offshoring antes de 2030, una iniciativa que no solo busca números, sino posicionar al Reino como el hub digital y de servicios más competitivo para Europa y el mercado francófono y anglófono.
Este movimiento no es una simple promesa política; es una hoja de ruta estructurada que promete inyectar miles de millones en la economía local y redefine lo que significa el “nearshoring” en la era post-pandemia.
Un Salto Cuántico en la Estrategia Digital Nacional
Marruecos ha dejado de ver el outsourcing como una actividad periférica para colocarlo en el centro de su estrategia económica. El plan, supervisado directamente por el Ministerio de Transición Digital y Reforma Administrativa, busca elevar los ingresos de exportación del sector digital a más de 40.000 millones de dírhams (aprox. 4.000 millones de dólares) para finales de la década.
La agresividad del plan radica en su enfoque integral: no se trata solo de ofrecer exenciones fiscales, sino de crear un ecosistema. El gobierno está invirtiendo fuertemente en infraestructura de telecomunicaciones de última generación y en la expansión de “Technoparks” en ciudades clave más allá de Casablanca y Rabat, descentralizando el empleo hacia regiones como Agadir y Tánger.
Motores de Crecimiento: Diversificación más allá del Call Center
Si bien la gestión de la relación con el cliente (CRM) sigue siendo un pilar fundamental, la nueva “Oferta Marruecos” pone un énfasis especial en subir la cadena de valor. El objetivo de los 130.000 empleos se desglosa en áreas de alta especialización:
ITO (Outsourcing de TI): Desarrollo de software, mantenimiento de aplicaciones y ciberseguridad.
ESO (Outsourcing de Servicios de Ingeniería): Investigación y desarrollo para industrias automotrices y aeronáuticas, sectores donde Marruecos ya es líder en África.
KPO (Outsourcing de Procesos de Conocimiento): Análisis de datos, finanzas y consultoría legal.
Esta diversificación busca atraer a gigantes tecnológicos globales que buscan talento cualificado a costes competitivos, sin las barreras horarias que presentan los mercados asiáticos.
Talento Humano: El Combustible de la Operación
Para llenar 130.000 vacantes en seis años, la infraestructura física no es suficiente; se necesita capital humano. Aquí es donde el plan muestra su faceta más ambiciosa. El gobierno marroquí ha firmado convenios con universidades y centros de formación profesional para adaptar los currículos a las necesidades reales del mercado digital.
Se están implementando programas intensivos de capacitación en habilidades blandas, idiomas (reforzando el inglés además del francés y español) y competencias digitales avanzadas. La promesa es clara: ofrecer a los inversores internacionales una fuerza laboral joven, nativa digital y lista para integrarse en flujos de trabajo globales desde el primer día.
Incentivos y Clima de Inversión: La Alfombra Roja
Para seducir a las multinacionales, la “Oferta Marruecos” incluye un paquete de incentivos financieros revisado y mejorado. Esto abarca desde subvenciones directas a la inversión inicial hasta apoyo financiero por cada puesto de trabajo creado y mantenido. Además, se ha simplificado la burocracia para la instalación de nuevas sedes, permitiendo a las empresas de BPO y TI operativizar sus centros en tiempos récord. La estabilidad política y económica del país, en comparación con otros vecinos regionales, actúa como un garante adicional de seguridad para la inversión extranjera directa.
El Futuro del Outsourcing se Escribe en el Magreb
La “Oferta Marruecos” no es solo un plan de empleo; es una declaración de intenciones. Al apuntar a captar 130.000 nuevos empleos en offshoring antes de 2030, el Reino se consolida como el puente definitivo entre África y Occidente. Para las empresas que buscan eficiencia, proximidad cultural y talento, Marruecos ha dejado de ser una opción para convertirse en una prioridad estratégica. La carrera hacia 2030 ha comenzado, y Rabat lleva la delantera.
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